Quiero compartir con ustedes lo que para mi es un dia normal ( o mejor de locos), cuando se tienen niños pequeños es muy dificil tener dias perfectos.
En la mañana despues de dejar a Juan en la ruta a las 7 am, regreso al apartamento a arreglar todo el desorden del dia anterior, lavar platos, recoger ropa, organizar a Mariana, organizarme yo, aumentandole que mientras hago esas cosas tengo a mi pequeñita pero muy energica hija haciendo muchas cosas entre ellas: pidiendome que la meta a la lavadora, que le abra cualquier llave para tomar agua pegada a ella, queriendo no bajar sino tirarse por las escalaras, subiendose a los muebles a saltar, entre otras. Este tipo de cosas hace que mi labor sea un poco mas lenta, pero igual a la hora del almuerzo el apartamento lo tengo muy bien organizado...
Y llega una hora especial del dia las 12:30 am, hora en que mariana duerme su siesta y yo tengo tiempo para 1. Correr con el oficio que me falta, 2. Organizar cosas de la Sociedad de Socorro, 3. Darme un tiempito para mi en el computador...
Despues de esto llega mi hijo a las 2 pm y vuelve la locura diaria. Hasta que se tienen dos niños es que uno es capaz de darse cuenta como tienen la habilidad de desorganizar en pocos segundos lo que a mi me costo toda la mañana organizar. Esta foto es prueba de ello....
Pero he aprendido que eso no debe estresarme tanto, yo solo me siento a leer un rato mientras ellos desordenan, igual son niños, muy pronto creceran y podre tener una casa organizada y extrañare las recochas, los gritos, y la locura de los dias que ahora vivo.
No comments:
Post a Comment